Cuidados en climas cálidos


Temperaturas que exceden por 5° a las temperaturas promedio para la región y que se mantienen por varios días o más se conocen como frentes cálidos. Sin los cuidados adecuados los frentes cálidos pueden causar muerte. Tú puedes minimizar los riesgos presentados por calores extremos mediante el ejercicio de cuidados preventivos:

Venciendo al calor

Elimina o reduce las actividades extenuantes en el exterior. Si no es posible, trata de programarlas en los horarios del día en que las temperaturas son las más frescas (temprano por la mañana o tarde por la noche). Comienza despacio y aumenta el paso gradualmente. Descansa frecuentemente en áreas con sombra.

Las quemaduras del sol hacen que la disipación del calor sea mucho más difícil. Para los niños de 6 meses en adelante se recomienda aplicar bloqueador solar con factor de protección no menor a 15 20 minutos antes de que sean expuestos al sol. Los niños menores a 6 meses no deben exponerse al sol.

La ropa ligera y con colores claros refleja el calor y la luz solar y ayuda a tu cuerpo a mantener temperaturas normales. Utiliza ropa de cortes holgados y de fibras naturales como el algodón y lino. Utiliza gorra o sombrero.

Nunca dejes a las mascotas o niños pequeños en un vehículo cerrado, no importa que los vidrios estén parcialmente abiertos. La temperatura del aire puede alcanzar los 60-85° C en un período de 30 minutos en un día cálido causando daño cerebral y muerte en cuestión de minutos.

Cuida lo que bebes y comes

Bebe muchos líquidos.- Tu cuerpo necesita agua, sales y minerales para mantenerse en funcionamiento. Bebe suficiente agua fresca (no fría), jugos naturales o bebidas para deportes que contengan electrolitos, no importa que no sientas sed. Evita las bebidas que contengan alcohol o cafeína. Durante ejercicio fuerte en un ambiente cálido bebe de 2 a 4 vasos de líquidos frescos cada hora. Las personas que padecen de problemas de epilepsia, corazón, riñones o hígado o están siguiendo dietas con restricción de líquidos deben consultar a un médico. Y no olvides de mantener a tu mascota con suficiente agua.

Come ligero.- Mantente lejos de una dieta alta en proteínas. Ellas incrementan la producción de calor metabólico y la pérdida de agua. Aliméntate con comidas más ligeras, más continuas y bien balanceadas.